Frecuentemente con el fin de proteger el producto, identificarlo, almacenarlo, enviarlo y trasladarlo, es necesario envasar y embalar aquello que se ha sido producido con tanto esfuerzo. La manera de hacerlo es propia de cada empresa.
En el mundo del diseño del envase, existen multitud de aspectos a considerar, como son la estética, la protección del juguete, la seguridad, el desembalaje, el medio ambiente, etc. Además existen cuatro criterios esenciales que hacen que un envase sea triunfador; son identificación, funcionalidad, personalidad y navegación, los cuales pueden presentarse conjuntamente o no.
Especialmente en el sector del juguete se trata de llamar la atención del usuario y al mismo tiempo debe convencer a los compradores. Se podría hablar de la utilización del marketing emocional para conseguir el fin del producto, que el niño o niña lo desee, llore, grite, lo pida constantemente hasta ser comprado por los padres o familiares. ¿Pero cómo se consigue que el diseño del envase atraiga al público para el que se ha diseñado?
En general, la responsabilidad recae sobre el diseñador, que utiliza el diseño gráfico, y la empresa en su totalidad. Un envase del sector del juguete debería cumplir ciertos aspectos muy importantes a la hora de su desarrollo gráfico.
El envase, como herramienta primordial para la venta del producto, debería tener la capacidad necesaria para ser visto y captar la atención del usuario. Las empresas tratan de ir directamente a la esencia misma del juguete, de brotar las emociones del público objetivo. Los usuarios finales son un público muy inteligente, si lo que ven les produce una emoción que les agrada, querrán el producto. Esto se consigue con las composiciones gráficas de los envases, con diferentes recursos utilizados como colores, tipografías, fotografías, ilustraciones, etc. No olvidemos las posibles formas de los propios envases, que también influyen en la decisión de los más pequeños.
Otro aspecto es la influencia de la marca y de la identidad corporativa sobre el envase. Un packaging que se identifique con la marca de una empresa, especifica una globalidad entre sus productos, además de una calidad y diversión asegurada. Si conjuntamente se crea una experiencia de compra, gracias a la adquisición de un buen producto, y si esta asociación entre la marca y el envase es recordada en un futuro, el éxito es notable.
Los juguetes que tienen licencia, es decir, que realizan copias de los personajes favoritos de los niños y niñas de diferentes series de televisión, películas… como por ejemplo los personajes de Disney, Bob Esponja, Pocoyo, Dora la exploradora y muchos más. En este caso el diseño del envase se basa en los grafismos que ya son más que conocidos por el público objetivo, lo único es que la empresa que diseña los envases para su juguete, lo haga de la forma correcta para su éxito.
Tampoco hay que olvidar la influencia de la disposición del producto en el punto de venta, se puede crear o no una acción de compra según la colocación del producto. Depende del tipo de punto de venta, de la colocación de los productos en las estanterías, si están en la cabecera de góndola o no, en los islotes, con la creación de espacios y ambientes que ayuden a introducir al niño en el entorno imaginario del juguete.
Pasamos al análisis de los recursos utilizados en el diseño del envase de juguetes como son los colores del envase, los recursos gráficos, la tipografía, etc. Estos aspectos varían según la edad y el sexo del público objetivo, algo muy notable, pues según el juguete éste deberá presentar unas connotaciones que el usuario identifique. El objetivo final del envase, la transmisión de un mensaje, varía según la tipografía utilizada. En un primer análisis se pueden identificar diferentes familias tipográficas dentro de un mismo envase.
El mundo de la tipografía es complejo, y se podría decir que casi infinito, y si además analizamos la aplicación en el diseño del envase del sector juguetero, aún más. Para ello se ha decidido hacer una selección de los envases a analizar. Se parten de los envases de las empresas Hasbro y Mattel, dos de las más importantes del sector juguetero mundial.
Se distinguen un total de cuatro tipografías diferentes en cada envase, este número depende del envase y la tipología del juguete. Se puede identificar una tipografía correspondiente a la imagen corporativa de la empresa fabricante, también referente a la marca o línea de productos, como sería Playskool, o de la empresa a los que pertenecen los personajes, como por ejemplo sería Disney y Pixar, o a la película como por ejemplo Toy Story 3.
Otra tipografía utilizada pertenece a la familia del lettering, representación única de la forma para reproducirla una sola ocasión, o familias como caligráficas, manuales o de fantasía, en general son de la familia de las gráficas, para definir el nombre del juguete, como por ejemplo Mr Potato Head. Aunque esto no indica que todas las que aparecen en el mercado son de estas características, pero al menos muchas de ellas se basan en las tipografías de edición para crearlas, con arreglos para darle toques más llamativos e infantiles, y obtener una tipografía casi lettering adecuada al producto.
Las demás tipografías que aparecen pertenecen a las familias de palo seco, sin remates, o las incisas, que tienen unos ligeros remates es sus extremos, para describir las funciones, historia y otros datos referentes al juguete.
Los recursos gráficos que complementan estas tipografías se apoyan a la tipología del juguete. En general, y según el sexo, se utilizan flores, mariposas, estrellas, nubes, rayos, círculos, elipses, manchas de pintura, formas redondeadas,…que junto con los colores elegidos forman un composición concreta para un envase. El conjunto entre la tipografía y los recursos, por ejemplo círculos alrededor del texto o título principal y, muy importante, los colores utilizados, forman un envase que llama la atención al usuario, según los gustos y preferencias de éstos.
No se pretende exponer que por la utilización de cuatro tipografías en un mismo envase, y según lo que se dice anteriormente, el producto vaya a tener éxito. Son meras pautas sobre lo que se encuentra actualmente en el mercado.
El mundo del diseño del envase para el sector juguetero es muy amplio. Obviamente. Según la empresa y sus objetivos, el producto y el destinatario, el reconocimiento del producto y de la marca, el capital invertido, el estilo de vida, entre muchos más aspectos, se utilizaran unos recursos diferentes, unos colores determinados, unas tipografías adecuadas.
AREA PLAY 6 | Packaging de juguetes, la tipografía utilizada | Raquel Ureña Gisbert.